Carta Abierta a la Presidenta
Sra Presidenta de la Nación,
Dra Cristina Fernández de Kirchner:
Somos ciudadanos comunes que no firmamos esta carta desde ninguna organización social ni partido político, sino desde nuestra simple condición de ciudadanos.
Queremos manifestarle nuestro profundo asombro, desazón y también tristeza, por los acontecimientos que acorralaron al Gobierno que usted preside, hasta infligirle una derrota absurda e inmerecida por la circular 125, siendo que en continuidad del anterior, sacó al país de la peor crisis en lo económico, social, polìtico e institucional, y lo ha hecho crecer como nunca antes en la historia.
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Queremos manifestarle que nos ha unido el deseo de expresarle nuestro apoyo a su gestión, a la polìtica inaugurada por el ex-Presidente Néstor Kirchner que usted continúa, desdeñando toda crítica o reserva, que hoy resulta una mezquindad, frente al tamaño despropósito de la lucha emprendida contra su Gobierno, y frente a los grandes méritos que se le deberían acreditar, salvo por interés sectorial rentívoro, o por efectos de la manipulación mediática o por amnesia.
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Antes que nada queremos manifestarle que nosotros no tenemos amnesia, ni intereses perversos, ni han logrado manipularnos desde los medios para revertir la lògica de nuestra razón, y dejar de ver lo que se hizo a favor de nosotros, de nuestros hijos, de nuestros mayores y de nuestros hermanos excluìdos.
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Por eso queremos empezar manifestàndole nuestra satisfacción por haber recreado la actividad económica productiva y comercial que significó trabajo para nosotros y para nuestros hijos, que interrumpieron su emigración ante un futuro que se veía nefasto y están de vuelta en casa.
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Queremos manifestarle nuestra satisfacción por haber terminado con la vergüenza y corrupción en el PAMI, que tenía a nuestros mayores condenados a una muerte indigna, la misma que nos esperaba a nosotros, los adultos de hoy que no somos rentistas, de no haberse revertido esa infamia por obra del Gobierno de Nèstor Kirchner, que usted continúa.
Queremos manifestarle nuestra satisfacción por haber terminado con la vergüenza y corrupción en el PAMI, que tenía a nuestros mayores condenados a una muerte indigna, la misma que nos esperaba a nosotros, los adultos de hoy que no somos rentistas, de no haberse revertido esa infamia por obra del Gobierno de Nèstor Kirchner, que usted continúa.
Queremos agradecerle, muy especialmente a usted, porque ha sido obra de su gestión, que haya incorporado a todas las personas en edad propia al sistema jubilatorio, aún a aquellas que por las crisis de los últimos años no reunían todos los aportes, ofreciéndoles una moratoria generosa inclusiva y justa, a miles de personas que de no haber sido consideradas en su incapacidad económica, hubieran quedado libradas al peor de los destinos, siendo éste también un hecho inédito en la historia.
Queremos manifestar nuestra satisfacciòn por la firmeza ideológica gubernamental al implementar una polìtica por los Derechos Humanos que comenzò a saldar las vergonzosas deudas del Estado Nacional con la memoria, que instaló definitivamente el discurso de los Derechos Humanos en la cultura de la sociedad argentina, que se aplicó no en la retòrica sino en las acciones del Gobierno en la firmeza de descartar la represión, también por primera vez en la historia, cosa que sentó precedente inequívoco para los futuros gobiernos en el respeto a la vida de los ciudadanos.
Es por todo esto, y mucho más, como la dignidad devuelta en la relación con el FMI y los fondos buitres, como el sostenimiento del valor del peso con recursos legìtimos, como el haber podido mantener la inflación a niveles bajìsimos por muchos años, como el haber sido solidarios con nuestros hermanos más pobres, piqueteros, cartoneros, excluídos, para quienes el Gobierno tuvo su polìtica de inclusión primaria mientras hacía crecer el empleo.
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Por todo esto es que estamos doloridos e indignados al haber sufrido junto a usted, día a dìa, minuto a minuto, señora Presidenta, las acciones de un grupo económico que nos desabasteció, que produjo inflación, que ensombreció y crispó nuestra vida por cuatro meses, que extorsionó al Gobierno con un despliegue de fuerza desmesurado, oprobioso para una Democracia.
Un grupo que exigió que se cumpla su único objetivo sin ofrecer negociación, hasta que logró por fin conseguirlo gracias a la insólita aprobación de los políticos de izquierda que se aliaron a sus enemigos naturales, gracias al resto de la oposición, que puso al Estado al servicio de un sector, y gracias a los medios de prensa, televisión y radiodifusión, que no sólo no desaprobaron sino que alentaron ese despropósito, y pusieron a jugar sus fuerzas cerebrales, obstinadas en destruir al Gobierno Popular.
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Por todo esto queremos pedirle que resista a las presiones de la facción gananciosa rentívora sobre el proyecto de distribución de la riqueza, que quiere ahora cobrarse las compensaciones de guerra, gracias al socio mediático que continúa azuzándola para mandar sobre la composición de su gabinete de Ministros.
Le pedimos, señora Presidenta, que no pague ni una moneda más por el rescate de su secuestro, que persista en la política distributiva y que preste atención a la mayoría amordazada por falta de nucleamiento o de poder como nosotros, que hoy hemos decidido sacarnos la mordaza y empezar a hablar.
Con todo nuestro inmenso cariño, la saludamos atentamente.
